Cuando un motor auxiliar diésel generador a bordo del buque de pasajeros Ocean Navigator explotó sin previo aviso en octubre de 2023, creó una crisis inmediata. Se inició un incendio y la sala de máquinas se llenó de humo. El crucero necesitó ser evacuado, pero el daño ya estaba hecho. La embarcación sufrió $2.4 millones en daños, y un miembro de la tripulación sufrió graves quemaduras.
Los experimentados abogados de lesiones marítimas de Hofmann & Schweitzer representan al marinero motorista gravemente lesionado que fue quemado por aceites en llamas durante la explosión del generador. Ha experimentado un dolor insoportable, ha pasado tiempo en unidades de quemados y ha participado en terapia ocupacional.
Todo esto era potencialmente evitable con un mantenimiento adecuado. Nuestros abogados de lesiones marítimas entienden cómo los protocolos de mantenimiento adecuados del motor de una embarcación pueden marcar la diferencia entre operaciones seguras y accidentes devastadores. Cuando los propietarios y operadores de embarcaciones descuidan los programas de mantenimiento recomendados por el fabricante, la tripulación y los pasajeros corren un grave riesgo.
Entendiendo los riesgos de fallo del motor
Los fallos del motor en embarcaciones marítimas pueden ocurrir por varias razones, incluyendo un mantenimiento inadecuado. La investigación de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) del incidente del Ocean Navigator reveló varios problemas críticos de mantenimiento que contribuyeron al fallo catastrófico, incluyendo:
Intervalos de cambio de aceite descuidados
- Ignorar las recomendaciones del fabricante. La tripulación del Ocean Navigator había cambiado por última vez el aceite lubricante del motor auxiliar fallido aproximadamente 13 meses antes del incidente. Luego, el motor operó más de 5,000 horas con el mismo aceite, excediendo la recomendación del fabricante por cinco veces. Cuando no se cambia el aceite según el programa, los contaminantes pueden acumularse y disminuir la calidad de la lubricación.
- Consumo anormal de aceite. En los dos meses previos al fallo del motor, la tripulación tuvo que agregar 79 galones de aceite lubricante al motor auxiliar. En comparación, solo se agregaron cinco galones a un motor similar operando en las mismas condiciones. Esta diferencia significativa indicaba un problema subyacente que no se abordó.
- Degradación de las propiedades del aceite. El uso prolongado del aceite reduce la efectividad de los aditivos diseñados para proteger los componentes del motor. Cuando el aceite se descompone, no puede lubricar adecuadamente las partes móviles, lo que lleva a una mayor fricción, calor y eventualmente a un fallo catastrófico.
Fallos en el reemplazo de elementos del filtro
- Uso excesivo de filtros. La tripulación cambió por última vez los elementos del filtro de aceite lubricante en mayo de 2023, cuando el motor tenía aproximadamente 11,000 horas. Para el momento del fallo, el motor había acumulado 14,329 horas, lo que significa que los filtros habían sido utilizados durante 3,329 horas, más de tres veces la recomendación del fabricante de 1,000 horas.
- Complicaciones con la válvula de bypass. Cuando los filtros se obstruyen, la válvula de bypass permanece abierta, permitiendo que las partículas de desechos circulen libremente por el motor. Estas partículas pueden causar rayaduras y daños a los cojinetes.
- Efectividad reducida de filtración. Los filtros sucios no pueden eliminar adecuadamente los contaminantes del aceite. Los contaminantes pueden circular y causar daños acumulativos a los componentes del motor.
Consecuencias del fallo del motor en embarcaciones
Las repercusiones de un fallo catastrófico del motor van mucho más allá del incidente inicial.
Inmediatamente después del fallo del motor, los peligros incluyen:
- Riesgos de incendio cuando el aceite atomizado entra en contacto con superficies calientes del motor
- Eyección de componentes metálicos a alta velocidad
- Lesiones graves al personal cercano
- Pérdida de energía en sistemas críticos
Las consecuencias pueden continuar mucho después de la emergencia inicial y resultar en:
- Costos sustanciales de reparación y reemplazo
- Tiempo de inactividad prolongado de la embarcación
- Posibles sanciones regulatorias
- Aumento en las primas de seguro
- Posible pérdida de confianza de los clientes
La mejor manera de evitar estas consecuencias es tomar las precauciones necesarias para prevenir el fallo del motor.
Mejores prácticas para evitar fallos del motor en tu embarcación
Para prevenir incidentes similares, los operadores de embarcaciones deben seguir las pautas del fabricante mediante:
- Cumplimiento de los programas recomendados. Siempre sigue las especificaciones del fabricante para cambios de aceite lubricante, reemplazos de filtros y otros elementos de mantenimiento. Estos intervalos se determinan mediante pruebas exhaustivas y son críticos para la confiabilidad del equipo.
- Documentación de todo el mantenimiento. Mantén registros detallados de todas las actividades de mantenimiento, incluyendo cambios de aceite, reemplazos de filtros y resultados de análisis de aceite. Revisar regularmente estos registros puede ayudar a identificar patrones que podrían indicar problemas en desarrollo.
- Implementación de programas de análisis de aceite. El análisis regular de aceite puede identificar contaminantes y metales antes de que causen daños catastróficos. Este enfoque predictivo permite un mantenimiento planificado en lugar de reparaciones de emergencia.
Mientras que estos pasos pueden ayudar a prevenir el fallo del motor, también es esencial monitorear indicadores clave mediante:
- Seguimiento de tasas de consumo de aceite. Los aumentos repentinos en el consumo de aceite pueden indicar problemas en desarrollo. Establece líneas base para el consumo normal e investiga cuando esos niveles cambien.
- Instalación de equipos de monitoreo. Las embarcaciones modernas pueden beneficiarse de sistemas de monitoreo en tiempo real que rastrean temperaturas de cojinetes, presión del aceite y otros parámetros críticos. Estos sistemas pueden proporcionar advertencias tempranas de problemas en desarrollo.
- Realización de inspecciones regulares. Las inspecciones visuales del equipo a menudo pueden identificar problemas antes de que causen fallos. Busca signos de fugas, ruidos inusuales o vibraciones que podrían indicar problemas.
El incidente del Ocean Navigator sirve como un recordatorio aleccionador de que el mantenimiento no se trata solo de mantener el equipo funcionando, sino de garantizar la seguridad de todos a bordo. Al seguir las recomendaciones del fabricante e implementar programas de mantenimiento integrales, los operadores de embarcaciones pueden reducir significativamente el riesgo de fallos catastróficos del motor, incendios, explosiones y las lesiones resultantes.
